jueves, 27 de junio de 2019

Crítica literaria "San Quintín".

Sir Julián Moreno fue un personaje real. Maestre de campo los tercios españoles, fue un veterano militar que luchó para mayor gloria de la España imperial de Carlos III y Felipe II.
Este personaje también es el protagonista de "San Quintín", novela escrita por José Javier Esparza y publicada por la esfera de los libros. Esparza se basa en las memorias de este noble soldado español para novelar los hechos acontecidos en la batalla de San Quintín, un conflicto que supuso una de las mayores victorias militares de España, en aquella época en la que España era la superpotencia mundial que ganaba todas las guerras.


Es una novela cargada con una gran rigurosidad, bien documentada, como corresponde a cualquier obra de temática histórica. Escrito en el lenguaje del siglo XVI, narra en primera persona la participación de Julián Romero en esta batalla. El relato arranca después de toda una vida de mercenario militar, en la que maese Romero estuvo bajo las órdenes de diferentes banderas y se forjó una fama entre los mandamases de Europa gracias a sus méritos militares en el campo de batalla. Sir Julián Romero (que también fue un caballero inglés), es un astuto y valiente veterano de guerra, que no se arruga ante ningún peligro.
La novela cuenta muy bien cuáles fueron los orígenes bélicos-políticos de esta campaña, partiendo de la conspiración urdida por el cardenal de Guisa, que logró convencer al papa de entonces y al rey de Francia para que el país Galo declarase la guerra a España, con el pretexto de recuperar la región italiana de Nápoles (que por aquel entonces, estaba bajo dominio español). También se relata cómo la intrépida intervención militar del Duque de Alba aborta esta intentona de la reconquista de Nápoles.
Es entonces cuando sir Julián Romero entra en escena, a petición de su viejo amigo, Felipe II, rey de España. Romero es el que idea la estrategia de trasladar el frente de la batalla, desde Nápoles hasta San Quintín, en territorio francés y muy cerca a París, la capital.
La novela no está falta de numerosas personalidades históricas, que participaron en este conflicto. Se narra minuciosamente cómo fueron los preparativos para la batalla, en la que Romero tuvo un papel esencial a la hora de sitiar el enclave de San Quintín. Incluso, el libro está surtido de mapas y esquemas, que ayudan a lector a comprender mejor las estrategias ideadas por Romero o por el mismísimo Manuel Filiberto de Saboya, que fue el joven general que comandó los ejércitos españoles, ingleses y alemanes que participaron en San Quintín, bajo el mando de la corona española. En resumen, que se entiende muy bien cómo se ganó esa batalla, protegiendo las posiciones defensivas y evitando los ataques suicidas...
Y como no, también hay violencia en este relato bélico. Los arcabuces, los mosquetes, las culebrinas y los falconetes cantan durante los diferentes enfrentamientos, bajo el entrechocar de las picas, las espadas y las dagas. Casi se puede captar el olor de la pólvora quemada durante la lectura.
Las descripciones de los eventos son tan pormenorizados, que incluso Esparza menciona cómo es la vida de las mujeres en los tercios españoles. En esta novela, el propio Julián Romero llega a presumir de esposa. Constance, su dueña y señora, es una atractiva flamenca pelirroja, que además, es de armas tomar. Esta mujer llega a tener un papel importante, tanto en la planificación, como en el desarrollo de la batalla de San Quintín...
Y terminando con esta entrada, concluyo que "San Quintín" es una novela entretenida, lejos del aburrimiento que causan los libros de texto, en el que el lector acaba por descubrir que no todo, en el pasado de España, está impregnado de derrotismo y leyenda negra.
Finalizo la reseña con un tema de Two Steps From Hell, que se ajusta como anillo al dedo a la ambientación de esta novela.



1 comentario: